El tomate es la hortaliza más difundida en todo el mundo y la de mayor valor económico. Su demanda aumenta continuamente y con ella su cultivo, producción y comercio. El incremento anual de la producción en los últimos años se debe principalmente al aumento en el rendimiento y en menor proporción al aumento de la superficie cultivada.
El tomate en fresco se consume principalmente en ensaladas, cocido o frito. En mucha menor escala se utiliza como encurtido.
¿Qué necesitamos?
Semillas: Lo primero que tenemos que hacer es conseguir las semillas. En casa, podemos seleccionamos los tomates más maduros, los partimos por la mitad y sacamos el jugo con las semillas a un vaso. Lo mantendremos tres días para que fermente y poder proceder a su lavado. Los tres días posteriores serán para su secado. Por otra parte, si lo que queréis en obtener la mejor calidad, podéis comprar las semillas:
– Tomate Muchamiel –
– Tomate Tres Cantos –
– Tomate Super Marmande (RAF) –
Tierra. La podemos mezclar con moho, estiércol o fertilizantes ó directamente, comprar sacos de tierra que portan sustratos especiales.
Maceta: necesitamos un recipiente como una maceta, contenedor o bandeja. Es aconsejable que sea de unos 50 cm de profundidad y de diámetro y con agujeros en la base. Es recomendable que la maceta sea de plástico. Si vas a trasplantar tu siembra en el exterior, usa recipientes de turba. Probablemente dejes tus siembras en los recipientes cuando las traslades, lo que reduce el riesgo de que la raíz se dañe. Antes de plantar semillas en una bandeja usada, esterilízala con un enjuague hecho con nueve partes de agua y una parte de lejía.
El Cultivo
Lo primero es preparar la maceta. En esta tenemos que echar la tierra con un sustrato de calidad hasta la mitad. El pH recomendado gira en torno a 6. También podemos mejorarla con materiales orgánicos como el estiércol. Si contamos con tierra arenosa utilizaremos fertilizantes para mejorar su calidad.
La ubicación será esencial para su crecimiento por lo que debemos asegurarnos de que el lugar es cálido y le da la luz.
Añadimos un poco de agua y esparcimos las semillas separadas entre sí. Después, rellenamos la maceta con la tierra restante que puede mezclarse con fertilizantes.
Las semillas tendrán que estar a 1cm aproximadamente de profundidad y podéis cubrir la jardinera con un plástico para evitar que se evapore el agua y manteniendo el ambiente cálido para el correcto avance de la germinación, pero siempre manteniendo la ventilación y sin tocar el sustrato. Si estás usando bandejas de semillas donde puedes acomodar muchas de ellas, colócalas con un espacio de 5 a 8 cm entre cada una.
Las semillas de tomate germinan mejor cuando la temperatura del suelo es de 24 a 32 grados, así que en estos primeros estadios deberás ubicarlas en un entorno más bien cálido.
Riega la tierra con un suave rocío para evitar sacar las semillas. Humedécelas cuando sea necesario. Las semillas no germinarán si están secas.
Para que crezcan con fuerza, la expondremos al sol directo por lo menos medio día (mínimo 6 horas). Cuando broten las semillas, quita la cubierta de plástico y mueve las macetas a un lugar donde reciba luz solar continua. La germinación generalmente sucede entre 6 y 14 días después de la siembra.
A partir de aquí, continúa regando tu siembra regularmente. Un método de irrigación efectivo es colocar las macetas en una bandeja grande con agua y dejar que la tierra absorba la humedad por los orificios de drenaje.
¿Cuándo y dónde cultivarlo?
Dependiendo de la cuidad en la que nos encontremos, los meses para la siembra variarán. En España, finales de febrero y principios de marzo es la época idónea para iniciar la siembra.
Si vivís en ciudades muy frías, tendréis que esperar un poco más. Pero, si por el contrario vuestra cuidad es de clima cálido y faltando poco para la primavera,ya podréis iniciar el cultivo de vuestros tomates.
Esta hortaliza se puede cultivar desde febrero hasta junio, así que ya podemos empezar a preparar el plantador. No podemos olvidar que hay que plantar las semillas unos dos meses antes de trasplantarla, que se hará con temperaturas más elevadas.
Últimas recomendaciones
Los cuidados de esta planta son mínimos. Solo bastará con saber que requiere una gran cantidad de agua y un clima cálido.
Necesita un clima caliente. Su temperatura ideal es de 20 °C, aunque con 15 °C ya puede crecer.
El riego es fundamental. Necesita mucha agua, así que lo haremos una vez al día(en el caso que no utilicemos la bandeja con agua).
Feliz cultivo!
Es muy importante proporcionarle nutrientes a la planta sobretodo si la cultivamos en tiestos o macetas. Por ejemplo, podemos añadir periódicamente unos 2 cm de compost casero o vermicompost sobre la tierra y enterrarlo ligeramente removiendo con los con los dedos. De esta forma, el compost se irá incorporando lentamente a la tierra de cultivo y la planta lo absorberá los nutrientes con mayor facilidad.
Un saludo
Hola a todos, soy nuevo en esto y deseo plantar tomates en mi terraza muy soleada. Estoy buscando información sobre el tipo de suelo que tiene que tener y según la información que recojo de distintas páginas es el siguiente: 25% de estiércol de caballo, 25% de humus de lombriz y el 50% restante de tierra comprada en la tienda. Desearía saber si esta combinación el la ideal o si no cual es la combinación ideal? Si no es mucho pedir podeis contestarme.
hola jose esa es muy buena combinacion yo le meteria 1 poco de perlita para retener 1 poco la humedad.